Hola amigas: tenemos las
Navidades a la vuelta de la esquina y debemos ir pensando en que ponemos en la
mesa. Los muslos de pavo rellenos es una buena receta, primero porque es una
receta sana, y luego es bastante económica. El pavo es un alimento muy típico
de las Navidades, el problema que tiene es que es muy seco y que las recetas de
relleno son demasiado pesadas. Creo que esta receta soluciona todos estos
problemas, tenemos una receta rica, jugosa y ligera.
INGREDIENTES.---
- 1 muslo de pavo deshuesado.
- 6 lonchas de panceta.
- 1 paquete de setas.
- 1 cebolla.
- ½ pimiento rojo.
- 1 puerro pequeño.
- 1 vaso de coñac.
- Agua.
- Sal.
- Aceite.
- Pimienta negra.
- Orégano.
- Clavo molido.
- 2 rebanadas de pan seco (opcional).
- 2 patatas.
ELABORACION.---
Primero pediremos al carnicero
que nos deshuese el muslo de pavo, aquí en el mercado el Campillo, les vende
así ya.
En una sartén pondremos aceite
de oliva, echaremos la cebolla muy picada (recuerda: si le añades una pizca de
sal, se hará antes), dejaremos sofreír un poco. Añadiremos el pimiento y el
puerro muy picados.
Cuando ya esté bien rehogado
añadiremos las setas troceadas y la panceta también troceada.
Agregamos las dos rebanadas de
pan seco desmenuzado, yo en esta receta no lo he echado por aquello de las
dietas…y entonces queda más suelto el relleno y si queréis más feos los
filetes.
Mientras, extendemos el muslo
y le ponemos sal, clavo molido, pimienta negra y orégano, rellenamos el muslo y
lo atamos con hilo de bramante.
Pelamos las patatas y las
cortamos en rodajas un poquito gruesas. Ponemos en agua y reservamos.
Cogemos una fuente para horno
y ponemos un chorro de aceite, ponemos una capa de patatas laminadas gorditas y
el muslo encima, volvemos a poner sal, pimienta, clavo y orégano en las patatas
y el muslo.
Añadimos el coñac. El jugo que
nos ha quedado en el plato al rellenar el muslo.
Y lo metemos al horno a 250
grados, durante 45 minutos aproximadamente.
Si se nos queda seco añadiremos ½ vaso de agua y ½ de coñac.
Cortar en rodajas gruesas y
rociarlas con la salsa.
Y así me quedó a mí, hasta
luego amigas,
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